La Vírgen del Prado ya no obra milagros
El CB Talavera, en su peor partido de la temporada, se vio superado por un CB La Solana que logró romper su mala racha lejos de su cancha. La salvación cada vez más lejos (56-79)
Este CB Talavera camina cuesta abajo y sin frenos hacia un descenso de categoría que ya se masca hasta el más optimista de los aficionados. En esta ocasión el camino que les llevó a la derrota no fue un pésimo cuarto, como suele ocurrir. Tampoco fue el problema de concentración en los minutos finales. Fue más bien lo que los médico llamarían un fallo 'multiorgánico', es decir: falló el ataque, falló la defensa, fallaron los tiros libres, fallaron los rebotes... Por todo eso y por mucho más los locales no supieron plantar cara a un CB La Solana que fue justo vencedor del encuentro (56-79) y de esta forma puso fin a su racha negativa de derrotas lejos de tierras ciudadrealeñas.
El buen comienzo local, propiciado por un enorme Carlos Miguel que anotaba y asitía, no hacía presagiar lo que minutos más tarde se convertiría en un monólogo de los chicos entrenados por Ángel Crespo. Y es que tras el 6-0 de parcial de los de casa llegaría la respuesta visitante con un 2-10 que acabaría con la resistencia local. Parecía muy temprano para bajar los brazos pero es que progresivamente el marcador iba aumentando en favor de los amarillos sin que nadie pudiera remediarlo.
Culpa de ese dominio la tuvieron en gran proporción el base Romero, autor de cuatro triples en cuatro intentos, así como el norteamericano Jackson y Palacios, dominadores del rebote tanto ofensivo como defensivo en la pintura. Los del Puerta de Cuartos no estaban en el partido y a cada canasta suya les acompañaban tres de ellos. De esta forma el primer cuarto se acabó con siete de ventaja la los de La Solana (17-24) y al final del primer tiempo dicho colchón subió hasta los 20 puntos (24-44).
Tras el paso por los vestuarios el CB Talavera buscó acercarse lo máximo posible a su rival para tratar de ponerles nerviosos pero su táctica resultó más bien inofensiva. Si Bustamante anotaba desde la línea de tres, Palacios le respondía a la jugada siguinte por lo que el choque estaba visto que volvería a marcharse lejos de la ciudad. En este tiempo la cuota siguió aumentando y se llegó al último tiempo con 27 arriba para los de Ciudad Real.
En el cuarto final parecía que la ventaja seguiría creciendo para los visitantes pero Ángel Crespo decidió no hacer más sangre y dio minutos a los que menos minutos tienen en su equipo. Por su parte Juan Antonio Serrano, sabedor del nuevo fiasco, se limitó a presenciar los compases finales como un espectador más. En estos últimos 10 minutos el CB Talavera logró maquillar un poco el marcador y al final la derrota sólo fue por 23 puntos (56-79). Los milagros existen pero a los talaveranos ya no hay Vírgen que los ampare. Ya ni la patrona, La del Prado.
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